MÉXICO, DF., agosto 5 .- Las lagunas en el sistema fiscal mexicano provocaron que la autoridad hacendaria tuviera que realizar devoluciones millonarias. Es el caso de Alsea, empresa de comida rápida que aprovechó un hueco en la ley del Impuesto al Valor Agregado (IVA) para exigir una cuantiosa suma a la autoridad. Tan sólo en 2006, el fisco les devolvió 145 millones de pesos.
En total, la empresa recibió 28 devoluciones de impuestos. Ahora la Secretaría de Hacienda prepara un paquete de reformas fiscales para mejorar la recaudación tributaria en el país. La historia se remonta a diciembre de 2002: el Congreso aprobó la reforma al artículo 2-A de la Ley del IVA, con lo cual las ventas en los establecimientos que ofrecen comida rápida tendrían que pagar IVA de 15% o 10% en alimentos “para llevar” o “para entregar a domicilio”. Hasta antes de este cambio fiscal, existía una laguna legal sobre si los alimentos producidos en servicios rápidos deberían cargar IVA o no a sus productos.
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